Juan Ramón Jiménez y la música
Silvia Nogales Barrios: Una excelente noticia
Hace apenas tres meses, en junio de 2014, Silvia Nogales Barrios, una de mis mejores alumnas en la Facultad de Educación de Ciudad Real, defendía en el Conservatorio Superior de Córdoba el trabajo Fin de Grado Las seis doncellas de Juan Ramón Jiménez: Relaciones musicales en sus textos y análisis de su recepción musical. Hacia un programa interdisciplinar para guitarra. Junto a la actriz Esther Acevedo Barrios, ambas jóvenes han elaborado un programa muy especial fundamentado sobre un estudio filológico y musicológico previo original largamente desarrollado durante un curso académico y centrado en la recepción musical de Juan Ramón Jiménez en la música para guitarra de Antón García Abril, Angelo Gilardino, Asins Arbó y, muy especialmente, en las composiciones especialmente dedicadas al Platero de Sainz de la Maza y Castelnuovo Tedesco.
No son muchos los estudios académicos que se han centrado sobre el papel de la música en Juan Ramón Jiménez (junto al reciente trabajo depositado en el Conservatorio Superior de Córdoba de Silvia Nogales habría que destacar el de María Ángeles Sanz, «La música en el universo poético de Juan Ramón Jiménez»,Tropelías: Revista de teoría de la literatura y literatura comparada. 1999, nº 9-10, pp. 407-419), y aunque algunos estudios estilísticos y semánticos se centren en el sentido de sus referencias musicales explícitas, no hay todavía un trabajo que examine la significación profunda de sus prontuarios musicales en las Arias tristes, así como este otro camino de recepción literaria que es sin duda la creación musical. Por esta razón el proyecto de Silvia Nogales y Esther Acevedo supone un paso definitivo en la comprensión del universo musical de Juan Ramón Jiménez.
El proyecto
Silvia Nogales diseñó en su trabajo Fin de Grado un proyecto que recorre los aspectos esenciales del hecho musical en el poeta onubense. Desde esta primera reflexión, actriz y guitarra, ayudadas por las bellísimas ilustraciones del Laura Ferreiro, han elaborado un concierto-recital, estructurado en dos partes, cuya primera sección recoge algunas obras de Falla, con quien, recordemos, Juan Ramón trabajó en un proyecto híbrido sobre la fábula del Polifemo y la ninfa Galatea. De este modo, pueden escucharse como reminiscencias de un universo sonoro compartido “El romance del Pescador”, la “Canción del Fuego Fatuo” y el “Homenaje a la tumba de Debussy”, composición que nuestro poeta –pocos lo saben- tuvo entre los estantes de su biblioteca personal. Esta primera parte se completa con dos evocaciones del universo poético de Juan Ramón: “Canta Pájaro Lejano”, de Antón García Abril, y “Elegia di marzo”, de Angelo Gilardino, estudio concebido como música que debe ser integrada en la declamación del poema.
Laura Ferreiro. Ilustraciones al “Platero”
La segunda parte del concierto se centra en la "Elegía a Platero", obra inédita de Asins Arbó, escrita con motivo de la película sobre el libro realizada por Alfredo Castellón en 1965, y una selección de movimientos de los Plateros escritos por Sainz de la Maza y Mario Castelnuovo-Tedesco (op. 190), composiciones que vieron la luz en el mismo año de 1960. De ellas debe destacarse, sin duda, la concepción del compositor fiorentino −concebida para narrador y guitarra en una calculada red de correspondencias verbales y musicales−, cuyo trabajo consta de cuatro volúmenes con siete movimientos cada uno, diseñados como lecturas paralelas y completas de una misma obra. Fabio Rizza nos informa con detalle de los distintos registros –siempre incompletos- que el Platero y yo de Castelnuovo-Tedesco ha tenido, subrayando la interpretación que de ella hicieran Andrés Segovia y José Ferrer.
El lector podrá escuchar aquí la magnífica interpretación de ambas jóvenes: